Cuando empezamos un nuevo trabajo, queremos ser útiles. Queremos utilizar nuestros talentos en beneficio de nuestro empleador. ¡Y esto está muy bien así! Pero esta actitud también debe encontrarse en todos los ámbitos de nuestra vida.
Un corazón demasiado duro para poder amar
“¡Bah! No creo en el amor … ” Algunas personas se han sentido tan heridas por una relación pasada que ya no se atreven a soñar con un hermoso romance. Sin embargo, Dios puede liberarnos de nuestro pasado para permitirnos volver a tener esperanza.
Soltero en el mirador
Las oportunidades a veces surgen en circunstancias inesperadas. Para notarlos y no perderlos, tienes que tener mucho cuidado. Un principio que se aplica no sólo a nuestra búsqueda de pareja, sino también a nuestra relación con Dios.
La diferencia entre el amor y la lujuria
Sentimos que nuestros corazones laten más rápido, nos sonrojamos de asombro al verla por primera vez. “¡Estoy enamorado!” ¿En serio? ¿Es realmente amor o es más lujuria?
Recuerda nuestros privilegios de perseverar
Sabemos lo que Dios espera de nosotros, pero cuando nos enfrentamos a deseos urgentes (¡como estar en una relación!), a veces perdemos el deseo de permanecer fieles a Dios. Mire las razones por las que permanecemos en santidad.