Teníamos planes para nuestras vidas, incluso invertimos nuestro tiempo y dinero estratégicamente. Pero aquí estamos, varios años (¡incluso décadas!) después, lejos de nuestros sueños. ¿Está todo perdido?

Teníamos planes para nuestras vidas, incluso invertimos nuestro tiempo y dinero estratégicamente. Pero aquí estamos, varios años (¡incluso décadas!) después, lejos de nuestros sueños. ¿Está todo perdido?
Ya sea a principios de año o en cualquier otro momento del año propicio para empezar de nuevo, hacemos todo tipo de propósitos. Queremos mejorar nuestra salud, nuestra apariencia, nuestras relaciones, etc. Pero ¿qué pasa con nuestra sabiduría?
Es la época del año en la que nos regocijamos de nuestros “buenos movimientos” y elegimos aprender de nuestros errores. ¡Un ejercicio igualmente útil para Passion374!
Sabemos que lo mejor que Dios nos ha dado es su Hijo Jesús. Su sacrificio nos dio vida eterna, ¿qué más podemos pedir? La generosidad de Dios no tiene límite y nuestro Padre quiere bendecir aún más a sus hijos.
Normalmente, cuando citamos un versículo del Génesis en una conferencia para solteros, es Génesis 2:18, porque habla del matrimonio. Sin embargo, antes del matrimonio viene una parte aún más importante de nuestra esencia: fuimos creados a imagen de Dios.