¿Cuántas malas decisiones tomamos porque reaccionamos al miedo? Miedo a perder, miedo a ser juzgado por los demás… ¡Cuidado! La voz del miedo puede sepultar la voz del Espíritu Santo y robarnos la paz.

¿Cuántas malas decisiones tomamos porque reaccionamos al miedo? Miedo a perder, miedo a ser juzgado por los demás… ¡Cuidado! La voz del miedo puede sepultar la voz del Espíritu Santo y robarnos la paz.
Hay pecados que salen de nuestra vida con mucha facilidad y otros que parecen aferrarse a nosotros por más tiempo. ¿Necesitas estar libre de un pecado particularmente duro? La solución está dentro de tu amor.
Hay días en los que nos sentimos feos o avergonzados de haber vuelto a cometer el mismo error. A veces tenemos la impresión de que Dios está decepcionado o incluso disgustado con nosotros. Sin embargo, ¡la realidad es bastante diferente!
Sabemos lo que Dios espera de nosotros, pero cuando nos enfrentamos a deseos urgentes (¡como estar en una relación!), a veces perdemos el deseo de permanecer fieles a Dios. Mire las razones por las que permanecemos en santidad.