Cuando somos personas generosas y compasivas con los demás, siempre estamos dispuestos a ofrecer nuestros talentos para satisfacer necesidades. Pero antes de emprender cualquier cosa, siempre debes hablar con Dios sobre ello.

Cuando somos personas generosas y compasivas con los demás, siempre estamos dispuestos a ofrecer nuestros talentos para satisfacer necesidades. Pero antes de emprender cualquier cosa, siempre debes hablar con Dios sobre ello.
¿Cuánto nos queda de vida? ¿Cuándo será finalmente el momento de hacer lo que estamos destinados a hacer? ¿Cuánto tiempo vamos a dejar que Dios espere antes de hacer la misión que nos ha dado?